"A imaxe é o vehículo da emoción, é a súa enerxía, e con ela facilítase o acceso á consciencia, é dicir, que toda emoción é factible de transformarse nunha imaxe. Toda imaxe conforma un acto creativo e é por iso que o inconsciente fundamenta a creatividade"
C.G.Jung

“Desde el punto de vista espiritual, el viaje no es nunca la mera traslación en el espacio, sino la tensión de búsqueda y de cambio que determina el movimiento y la experiencia que se deriva del mismo”.
“En consecuencia
estudiar, investigar, buscar, vivir intensamente lo nuevo y profundo, son modalidades de viajar o, si se quiere, equivalentes espirituales y simbólicos del viaje”.
J.E. Cirlot

jueves, 4 de febrero de 2016

XOSEFA

Xosefa Tolrà i Abril (Cabrils, 1880 ? 1959) foi unha medium catalá e debuxante autodidacta que executaba as súas obras en estado de transo.
A súa obra sorprendeu a artistas como Joan Brossa, Modest Cuixart ou Antoni Tàpies. O Museo Reina Sofia, o Museo de Arte Contemporaneo de Barcelona, Can Palauet (Mataró) i l'Institut d'Estudis Ilerdencs expuxeron parte da súa obra. No ano 2015 figurou entre os artistas da mostra Do segon orixe. Arts a Catalunya 1950-1977 realizada no Museu Nacional d'Art de Catalunya.

































Josefa Tolrà, una revisión necesaria

David G. Torres
Con Josefa Tolrà pasa como con la mayoría de los descubrimientos. Están ahí, delante de los ojos de muchos, pero sólo unos pocos saben verlos, hasta que alguien los señala con énfasis, entonces es cuando llega algún otro y se los apropia. De momento, Pilar Bonet, comisaria de la esta exposición, en las salas Can Palauet de Mataró, señala con énfasis la existencia de esta extraña, curiosa, peculiar e interesantísima artista de la que por primera vez se muestra una amplia selección de su obra.
Josefa Tolrà nació en 1880 en Cabrils (un pequeño pueblo cerca de Mataró al norte de Barcelona), apenas tuvo acceso a la educación, empezó a trabajar en una fábrica textil muy joven, se casó, tuvo una hija y dos hijos, uno murió antes de la guerra y el otro en ella. Hasta aquí su historia no tiene nada de extraordinario, suma las limitaciones y desgracias que padecieron tantas mujeres de la época. La muerte de su segundo hijo la dejó trastocada: se llena de miedos, no puede dormir, hay voces que la persiguen por casa. Y aquí empieza lo extraordinario. Alguien, porque nunca acudió a un psiquiatra, le recomienda que dibuje y que escriba lo que oye. La Tía Pepeta, que es como se la conoce en Cabrils, con sesenta años, en 1942, empieza a llenar libretas con dibujos fabulosos. Nunca ha viajado, sólo una vez a Badalona para visitar a una médium, y sin embargo pinta escenas que transcurren en el Líbano. No ha tenido acceso a la educación, pero escribe sobre la teoría de los colores y sobre Cristo, Napoleón o el poeta Verdaguer. Sobre este último lo hace en catalán, pero, sobre los otros, en castellano, idioma que a duras penas habla cuando no está en trance, sólo cuando se comunica con lo que denomina los “seres de luz”. En la zona es conocida por sus dibujos y por ser una médium. Y debió de ser así como también llegó a conocerse entre la vanguardia catalana de aquellos años.
Seguramente fue el escultor Moises Villèlia o el dibujante Manuel Cuyàs, que residían en la zona, los que llamaron la atención sobre Josefa Tolrà a otros artistas. En la primera mitad de los años cincuenta, el crítico de arte Alexandre Cirici, el poeta y artista Joan Brossa y el artista Antoni Tàpies empiezan a visitarla. Evidentemente están interesados por todo lo que rodea lo oculto, lo hipnagógico y lo que de alguna manera continúa la línea surreal o lo que Jean Dubuffet llama art brut que tanto interesó a los artistas ligados a Dau al Set. Así que les llama la atención los dibujos esmerados y obsesivos en el trazo de Josefa Tolrà, sus superposiciones entre diferentes formas, la mezcla de narrativas, el relleno obsesivo hasta los márgenes o la escritura que se sobrepone al dibujo, y viceversa. A algunos de ellos, la artista/médium regala algún dibujo, nunca los vende. Y en 1956, Alexandre Cirici organiza su primera exposición en la galería Gaspar de Barcelona. En 1959 la artista muere. No será hasta 1998 cuando en el contexto de una exposición de asociaciones en Mataró, una de ellas, ACM (asociación para la cultura y el arte contemporáneo de Mataró) de la que Pilar Bonet también forma parte, vuelve a mostrar un dibujo de Josefa Tolrà. Entonces también hubo un encuentro extraordinario, una conversación de Joan Brossa sobre la artista.
(…)
Fragmento, ver artículo en El Cultural
http://www.elcultural.es/version_papel/ARTE/34007/Josefa_Tolra_una_revision_necesaria




3 comentarios:

  1. Hermosa entrada querida amiga. Nos descubres otra Maga perdida en la historia... Me fascinaron sus dibujos ni bien los vi, están hechos con capas y capas de sueños, como fabulosos bordados del inconsciente.

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  2. Hermosa entrada querida amiga. Nos descubres otra Maga perdida en la historia... Me fascinaron sus dibujos ni bien los vi, están hechos con capas y capas de sueños, como fabulosos bordados del inconsciente.

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  3. Hola , mi reina. No vi tu comentario hasta ahora mismo.Esta luna está tan solitaria últimamente que ya nunca espero visita. Gracias por venir y comentar. Un gran beso.

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Moitas grazas.